
El cuerpo humano necesita el oxígeno para vivir y, es por eso que es sumamente importante que mantengamos nuestro sistema respiratorio en excelentes condiciones. Tener una buena salud pulmonar requiere de algunos cuidados y ejercicios que aumenten la capacidad pulmonar. Para gozar de una mejor salud pulmonar es importante hacer una respiración consciente y evitar la respiración superficial, ya que esta última no llena del todo los pulmones.
Al hacer ejercicios el corazón y los pulmones se activan. Los pulmones oxigenan el cuerpo, proporcionan energía y eliminan el dióxido de carbono. Por su parte, el corazón se encarga de bombear el oxígeno a los músculos involucrados en el ejercicio. Es así como el organismo se purifica y se mantiene lleno de energía. La mayoría de los ejercicios que contribuyen a la salud de los pulmones requieren de una correcta e intensa respiración. Estos ejercicios no solo ayudarán a las personas que tienen dificultades respiratorias, sino también a las que gozan de buena salud.
Ejercicios que ayudan a fortalecer los pulmones
Respiración desde el diafragma: la manera de respirar correctamente es utilizando el diafragma, así los pulmones se expanden y se llenan más de oxígeno. No todos dominan este tipo de respiración pero, con práctica, se puede lograr. Solo debemos concentrarnos.
¿Cómo se hace?
- Relajar la parte superior del cuerpo y poner una mano sobre el abdomen.
- Respirar profundo por la nariz y hacer que nuestro abdomen se infle. Luego, expulsar el aire lo más lento que podamos.
- Si al exhalar nuestro abdomen se contrae, estamos respirando correctamente.
- Repetir el ejercicio 5 veces y descansar entre cada repetición. Tratar de hacerlo la mayor cantidad de veces que podamos por día para que el cuerpo se acostumbre a respirar de la manera correcta.
Yoga: es una disciplina muy beneficiosa para la salud pulmonar. Te ayuda a controlar la respiración poniendo en armonía el cuerpo y la mente. Más que yoga físico debemos practicar el “pranayama”, que es la técnica básica de respiración en yoga. Esta modalidad nos enseña a respirar y a desarrollar nuestra capacidad pulmonar dándonos más resistencia en actividades físicas. Para ello, debemos tomar respiraciones largas y profundas y exhalar lentamente. La postura o asana ideal para hacer pranayamas es la postura del loto. Esta requiere estar sentado con la columna vertebral derecha y así logramos que el aire fluya con mayor facilidad.
Ejercicios aeróbicos: trotar, saltar, caminar, correr o bailar, ayudan a que nuestro ritmo cardíaco se incremente y, por ende, necesitemos más oxígeno.Cuando el cuerpo se somete a este tipo de actividades demanda mayor cantidad de oxígeno, por lo que debemos controlar nuestra respiración y tomar todo el aire que necesitemos. Esto hace que nuestra capacidad pulmonar aumente. Los ejercicios de intervalos son muy buenos para fortalecer la salud pulmonar debido al grado de exigencia que tienen. El cuerpo varía las demandas de oxígeno de acuerdo a la intensidad del ejercicio. Lo importante es que siempre nos mantengamos por mayor tiempo en la intensidad más baja y por menor tiempo cuando aumentas la velocidad. Además, esta clase de ejercitación también ayuda a quemar grasas.
¿Cómo se hace?
- Un ejercicio de intervalos sencillo es trotar por 4 minutos y correr por 1.
- Podemos variar el ejercicio a caminar rápido-trotar si no contamos con la resistencia necesaria como para correr durante un minuto.
Soplar por el mayor tiempo posible: podemos practicar varias modalidades. Una de ellas es soplar un globo. También, hay otra muy divertida en la que podemos usar una tira de papel.
¿Cómo se hace?
- Tomar una tira de papel y pegarla a la punta de tu nariz.
- Inhalar y luego soplar el mayor tiempo que puedas para mantener la tira en el aire.
- Practicar con frecuencia para que podamos mantener la tira de papel en el aire por mucho más tiempo.